Gracias TLC! ! ! !

Durante muchos medios se ha insistido en presumir los beneficios que ha nuestro país ha traido el TLC, que ahora somos mas amigos de esa nación del terror, que ahora si exportaremos nuestras artesanias y demas cosas.

Por eso hoy me dispongo a publicar un articulo qu encontre en un periodico y el cual demuestra que las cosas no son como las pintan.

FRICASÉ

Pudo Ser y No Fue

EL ABOGADO DEL PUEBLO

Este año de acuerdo con los expertos, la automotriz japonesa Toyota superará a la norteamericana General Motors como el fabricante de automóviles más grande (y mas rentable) del mundo.
¿Y esto qué tiene que ver con México?
¡Que General Motors está instalada en México, pero la Toyota no!
De hecho, la Toyota estudió la posibilidad de instalar aqui la planta clave que la propulsará este año al pinaculo de la producción automotriz mundial: la producción de su popular camioneta Tundra, rediseñada para el 2007, y con la cual la japonesa talará el pilar que sostiene a los fabricantes norteamericanos: las camionetas pick up, las cuales no solo le representan volumen, sino rentabilidad.
Después de mucho estudio y deliberación, Toyota optó por instalarse en San Antonio, Texas y no en México, para desde ahí socavar el imperío de la que fue en otra época la empresa insignia del poderío industrial norteamericano.
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De manera que contar con una planta Toyota en una comunidad le permite a está no sólo beneficiarse con miles de empleos bien remunerados, sino la capacitación de la fuerza laboral local en lo que es la filosofía vanguardia de los procesos de producción masiva: cantidad con calidad, adjetivos que antes se consideraban mutuamente excluyentes.
El haber perdido la inversión de Toyota le representó a México el desperdicio de una gran oportuindad (más aún al stado de Nuevo León, que le hizo una fallida lucha a captar esta importantísima inversión), y ello en varios frentes simultáneos.
Por lo pronto, con el arranque de la planta de San Antonio, la cual inició producción a finales de noviembre pasado, cayó derribado un MITO: que México posee una ventaja competitiva basada en el bajo costo de su mano de obra.
La decisión del genial management de esta empresa global de ubicarse fuera de México nos dice que nuestra "ventaja" no existe y que, en el fondo, quienes nos ANALIZAN de fuera contemplan en el panorama de inversión mexicano más desventajas que ventajas.
Esta decisión derriba igualmente OTRO MITO, que el TLC constituye en sí otra ventaja competitiva para México vis a vis con sus competidores globales.
Que las empresas que PIERDEN mercado y pierden competitividad nos escojan, mientras las que van en ascenso conquistando mercados e incrementando su eficiencia NOS REPUDIEN es algo que debe preocuparnos, pues implica que en nuestro actual sistema, en el modus operandi industrial que hemos escogido, arrastramos enormes fallas y vicios: alguno aparentes y otros ocultos.
Ello cuando colectivamente pensamos justo lo contrario, sobre todo a nivel Gobierno, y nos creemos las reinas de la fiesta de la inversión, cuando somos realmente chicas del montón.
Para nuestra Secretaría de Economía, estudiar minuciosamente el caso Toyota (por qué se fueron y no se quedarón aquí) debe ser una prioridad, pues sólo enterándose de cuáles son nuestras carencias y fallas podemos aspirar a enmendarla y tornarnos realmente competitivos en los hechos, no sólo en nuestra imaginación y en los discursos ofiiales.

"EL Norte", Miércoles 21 de Febrero del 2007, OPINIÓN 13